SER LÍDER SOCIAL EN COLOMBIA
Si quieren saber por qué el Colegio Nacionalizado La Presentación es el mejor colegio público de la ciudad, en el siguiente texto está cifrada la respuesta. Se publicó el año pasado en la Revista de filosofía Sophos, dirigida por el profesor Félix Pérez; y tuve la fortuna de conversar con la autora, quien amablemente accedió a compartirlo en nuestro blog. Cuando las mujeres toman la palabra, y lo hacen cargadas de reflexión y crítica, los demás tenemos que escuchar, atentamente. Ojalá el esfuerzo que hacemos esta semana sirva para que algunos lectores reflexionen sobre lo que implica la violencia en nuestro país, que hace de los pobres, sus víctimas preferidas. Agradecemos a Sara Valentina por su valentía y por su fuerza, y porque sus palabras se vinculan a este esfuerzo de profes de la ciudad para hacer de la Cátedra de la paz un espacio necesario para humanizar. El día de hoy le dimos la palabra a estudiantes de la ciudad, y junto a este ensayo, recomendamos el de JAV, publicado en horas de la mañana, titulado NOS DA MIEDO QUE LLEGUE LA NOCHE... lo encuentran en el siguiente link:
Gracias por la paciencia y el apoyo y roten si pueden...
MFP
SER LÍDER SOCIAL EN COLOMBIA
Por Sara Valentina Ruiz Galindo
Estudiante del Colegio Nacionalizado La
Presentación
“Ser
líder social no nos puede costar la vida ni la libertad”
Anónimo.
Según Indepaz
([1]) 71 líderes sociales y Defensores de Derechos
Humanos han sido asesinados en Colombia, solo en los primeros tres meses del 2020 (Indepaz, 2020) . Estos datos son
completamente aterradores, en especial en Colombia; un país ganador del nobel
de paz. El pasado 20 de marzo fue publicado el informe mundial de la felicidad realizado por
la ONU que detalla la lista de los países más felices del mundo (Torres,
2019) ;
Colombia ocupa el cuarto lugar en Latinoamérica y es muy contradictorio que a
su vez sea el país más peligroso para los líderes sociales en todo el mundo, según
el último informe de la organización Front Line Defenders ([2]). (Redacción Nacional, 2020) Entonces, ¿somos
felices asesinando líderes?
Ahora bien,
si vamos a hablar de líderes sociales debemos partir por conocer ¿Qué es un
líder social? Según la ONU, la expresión “defensor de derechos humanos” se usa
para describir a la persona que, individualmente o junto con otras, se esfuerza
en promover o proteger esos derechos, y agrega que se les conoce sobre todo por
lo que hacen. Además, afirma que la mejor forma de explicar lo que son consiste
en describir sus actividades. “Los líderes sociales se esfuerzan en promover y
proteger los derechos civiles y políticos. En lograr la promoción, la
protección y el disfrute de los derechos económicos, sociales y culturales” (Salazar,
2019)
explica la ONU, que además indica que los defensores actúan en favor de
derechos humanos tan diversos como el derecho a la vida, la alimentación, el
agua, el nivel más alto posible de salud, una vivienda adecuada, un nombre, una
nacionalidad, la educación, la libertad de circulación y la no discriminación.
Palabras más,
palabras menos, un líder social es cualquier persona que se esfuerce en
promover los derechos humanos, que toma la vocería por su comunidad local,
aquel individuo que trabaja por el pueblo, aquel que busca crear conciencia, es
aquella persona constructora de paz, que su mayor deseo es que las cosas
cambien para bien, aquella persona que piensa diferente, que conoce sus
derechos y trabaja por la paz. Esto no tiene nada de malo ¿no? Entonces, ¿cómo
explicamos que en este 2020, se asesina a un líder social por día? (Semana, 2020)
El asesinato
de los líderes sociales no es algo nuevo. Solo falta retroceder las páginas de
nuestra historia para recordarle al pueblo colombiano que este genocidio nos
lleva afectando desde hace mucho tiempo. Un claro ejemplo de este fenómeno tan
aterrador es el caso del caudillo liberal Jorge Eliécer Gaitán, un gran líder
social que enamoró al pueblo colombiano con su oratoria, luchó arduamente
contra las clases sociales dominantes, trabajó estrechamente con el pueblo y al
igual que muchos defensores de los derechos humanos buscaba una Colombia en
paz; pero el 9 de abril de 1948 el pueblo tuvo que ver como las puertas se
cerraban al final del túnel y con una dura combinación entre dolor y rencor se
despidieron del caudillo. Si hablamos de líderes sociales asesinados es
inevitable nombrar a Jaime Garzón que con su humor y sátira política logró
robarse el corazón de los colombianos. Su sencillez, humildad, carácter,
cinismo y su gran capacidad de expresarse lo llevó a ser la admiración de muchos
y el blanco de otros. Un joven que luchó por una política critica, una
construcción de paz y una conciencia colectiva; desafortunadamente el viernes
13 de 1993, Colombia tuvo que despedir a Heriberto de la Calle; adiós a un
líder que nuevamente el hecho de no tener pelos en la lengua fue el detonante
de su asesinato. Estos casos mencionados anteriormente son pruebas fehacientes
que dejan en evidencia la gran problemática que llevamos afrontando, donde lastimosamente
buscar el bien en Colombia es colgarse la soga al cuello.
Incremento de los líderes sociales asesinados
La ONU hizo
un llamado al Gobierno colombiano para investigar los casos de nuestros líderes.
“Esta terrible tendencia no muestra desaceleración” (Meza,
2020)
dijo Marta Hurtado, vocera del organismo.
A pesar de que la ONU es consiente del incremento de los líderes sociales
asesinados no parece ser algo relevante para ellos; no basta con preocuparse, de
nada sirve alertar, necesitamos que tomen medidas y actúen. Pasan los días y el
número de víctimas aumentan. Si nuestros mandatarios nacionales no lograron
solucionar este genocidio, la ONU debe hacer uso de su poder para mejorar la
situación. Menos palabras, más actos.
En Colombia
estos líderes son: reclamantes de tierras, afrodescendientes, indígenas, barqueros,
cocaleros, desplazados, comunidad LGBTIQ, entre otros. A la hora de analizar
estos grupos con sus respectivos líderes, hay algo que tienen en común: trabajan
por generar condiciones de vida digna y empoderan a las comunidades. Si todos
sus objetivos son positivos. ¿Qué está pasando?
Para Carlos Negret, defensor del pueblo
colombiano, el análisis de los 431 casos documentados entre el primero de enero
de 2016 y el 31 de diciembre de 2018 permite evidenciar las causas
fundamentales del asesinato de líderes: principalmente estarían vinculados al
narcotráfico y a la economía del oro, así como, en menor medida, a la
restitución de tierras. “Los están asesinando porque no quieren cultivos de uso
ilícito en su zona, porque no quieren que las máquinas amarillas como en el Chocó,
en todo el andén pacífico, sigan sacando el oro” (nacional, 2019) dijo el defensor a
Blu Radio.
La
desaparición de los líderes y lideresas asesinados en Colombia, como muchos
otros aspectos en el país son realizados por “Don Nadie” pues se desconoce a
los victimarios. Pero en la lista de sospechosos encontramos a: grupos
paramilitares, el ELN ([3]),
el (EPL) [4],
disidentes de las FARC ([5]),
grupos de seguridad privada y la fuerza pública. Si bien los grupos mencionados
son solo sospechosos y no se tiene un autor en concreto a quien atribuirle tantos
crímenes; lo que sí está claro es que quienes están detrás de estos asesinatos
viven del despojo de tierras, del monocultivo de ciertos productos, de las
explotaciones del subsuelo, de sacar los recursos naturales, de la explotación
de los campesinos; son personas que han hecho sus fortunas con el sistema tal y
como está, por ende, esperan que las cosas no cambien. Son personas que están
interesadas en mantener su poder político y económico. Los grupos mencionados
anteriormente asesinan a todo aquel que se interponga en sus planes porque para
ellos el hecho de que alguien conozca sus derechos y utilice sus capacidades
para mejorar la situación significa “una piedra en su zapato” y sin dolor ni
remordimiento los desaparecen sin explicación alguna, sin medir las
consecuencias. Es una lástima que individuos tan valientes tengan que terminar
de una manera tan desastrosa, como por ejemplo Temístocles Machado o José Jair Cortés.
El activista
social Temístocles Machado fue un ser ejemplar, desde pequeño fue víctima de la
violencia, pues cuando niño tuvo que abandonar Bagado (Chocó) por una masacre,
llegando así a Buenaventura. Desde pequeño sintió la necesidad de ayudar a las comunidades,
ya que su padre le infundió valores de conciencia y respeto ciudadano. “El
pueblo no se rinde, carajo” es una frase que repetía constantemente en sus
discursos. Con valentía y coraje logró ser el presidente de la JAC([6]).
Don Temis, como se hacía llamar, se convirtió en un defensor de los derechos
humanos, un reconocido líder que promovió el Paro Cívico en Buenaventura.
Asumió la lucha de las tierras en la comuna 6 y pese a sus amenazas siempre respondía:
“irme sería rendirme, olvidar a mi historia y a mi padre”. Murió con la frente
en alto pues hasta sus últimos días estuvo encabezando su proyecto. Fue
asesinado el 27 de enero de 2018 a las 5:10 p.m. en Buena aventura.
Otro
activista social fue José Jair Cortés, quien hacía parte del consejo
comunitario que viene denunciando la situación de violencia en Tumaco. Hace un
año, en la tarde del martes 17 de octubre, fue asesinado. Él se había
desplazado un mes antes al casco urbano del municipio y se encontraba en la
vereda Restrepo visitando a su esposa que estaba enferma. Su nombre era uno de
los más reconocidos en las comunidades étnicas del pacífico colombiano. Fue él
quien se reunió con el gobierno para pedir celeridad en la ejecución de los
planes de sustitución de cultivos de uso ilícito.
Así como Don Temístocles
y el Señor José existen cientos de líderes que han perdido su vida por apoyar
causas buscando un progreso. Nombres como el
de Tatiana Paola Posso Espitia ([7])
, Miguel Antonio Gutiérrez ([8]),
Ana María Cortés Mena ([9])
, entre otros han sido víctimas de este ataque sistematizado. ¿Y qué opinan nuestros
mandatarios frente a esto?
El 2020 no
inició de la mejor manera para nuestros líderes, pues en enero se presentó la
cifra más alta de asesinatos registrada en los últimos años, pero, algo más
grande iba a golpear no solo a nuestra amada Colombia, sino a todo el mundo. La
pandemia por el covid-19 ha afectado a todos los sectores a nivel global. En
Colombia ha sido el punto más importante para nuestro gobierno, sin embargo,
cuando se supone que es el momento de unirnos contra este virus, de trabajar
por la salvación de la humanidad y acatar la medida de aislamiento, las
desgarradoras muertes de nuestros líderes no parecen cesar. Con tan solo una
semana de la medida de aislamiento preventiva obligatoria, 5 líderes y
defensores fueron asesinados en Colombia. (Semana, 2020) Esta masacre parece
no tener limite, ni en los momentos más difíciles para la humanidad, tienen un
poco, solo un poco, de respeto hacia nuestros líderes. Al parecer para nuestros
entes gubernamentales, solo existe la pandemia, pues si bien, es un pilar de
gran relevancia en la actualidad, no es lo único que acontece al país. Nuestros
medios de comunicación han quitado importancia a estas cifras, dejándolas en un
segundo o hasta tercer plano, limitando la información que es publicada. Siguen
asesinando a estas venerables personas y para el gobierno este tema parece no
ser digno de su atención.
Un gran número de líderes sociales pertenecen
a la zona rural y por esto sus casos no son expuestos de manera extravagante
por redes. Qué falta de sensibilidad por parte de las entidades gubernamentales,
ya que, desde un principio se solicitó la presencia del Estado, pero éste nunca
hizo presencia interinstitucional. Su falta de competencia es tan grande que
salen con la excusa de que nuestros líderes están ligados al paramilitarismo o
que son asesinados por “líos de falda”. ¿Cuántas veces tenemos que repetir la
historia para aprender a elegir a nuestros gobernantes?
Sería una
completa desfachatez desmeritar la gran labor que ha hecho el gobierno junto
con la defensoría del pueblo y la Agencia Nacional de Protección por mantener a
nuestros líderes “a salvo”. Recuerdan nuestro gran líder Temístocles Machado,
pues él recibió medidas de protección por parte del gobierno en 2006, cuando se
inauguró la vía alterna, pero ésas medidas de protección se las quitaron porque
después de que la vía siguió funcionando supuestamente ya no corría peligro;
gracias a que fue retirado el esquema de protección Don Temístocles no está hoy
luchando por la comuna 6.
La UNP ([10]) ha sido varias veces
demandada por no proteger de manera apropiada a los activistas comunitarios o
por negarse a brindar seguridad. Frente a estas inconformidades de los
ciudadanos la Unidad señala que el Gobierno brinda protección a 7.400 personas,
de las cuales 4.500 son líderes sociales. Entendemos que el resto se joda
porque no hay más espacio… Es necesario y urgente que el estado haga presencia
en estos casos, al parecer este tema se ha naturalizado de una manera tan
absurda. Necesitamos protección, pero no cualquier tipo de protección; una
protección de calidad que garantice la vida de nuestros líderes, no basta con
unos escoltas o carros blindados.
Generalmente
escuchamos “líderes sociales” pero hay que hacer la gran aclaración de que este
término agrupa hombres y mujeres. Ahora bien, el papel de la mujer líder en
Colombia es, sin desmeritar al sexo opuesto, el más duro y a su vez el más
importante. Codhes ([11])
estudió los patrones de violencia que sufren las mujeres que ejercen liderazgos
en las regiones. El informe evidenció que “La deshumanización, por parte de los
actores armados contra las personas que ejercen liderazgo, se exacerba contra
las mujeres” (El Espectador, 2019) , también advierte
que las finalidades de las violencias son diferentes contra los líderes y las
lideresas: mientras que contra ellos tiene el objetivo de eliminarlos la que se
ejerce contra ellas busca castigarlas. Incluso, los homicidios tienden a ser
más crueles cuando asesinan mujeres. Sisma Mujer encontró que en el 66% de
asesinatos contra ellas se encuentran agravantes como la violencia sexual y la
tortura.
Nombres como
los de la lideresa Elizabeth Pabón, presidenta de la Asociación Campesina del
Catatumbo; Marylén Serna, lideresa campesina de Cajibío, Cauca y Roseli
Finscué, indígena nasa de Tierradentro merecen ser resaltados, ya que ellas al
igual que otras mujeres siguen trabajando por la justicia, buscando un país
mejor; sin importar las amenazas y los riesgos que esto implica. Los datos
evidencian la valentía por parte de todas las mujeres que asumen el papel de
líder en sus comunidades. Todos conocemos el gran esfuerzo que ha tenido que
hacer la mujer colombiana por sobresalir, demostrar que es capaz de realizar
labores a par con los hombres ha sido un camino muy extenso y que hoy nuestras
mujeres encabecen proyectos de progreso y trabajo en comunidad es una prueba de
lo competentes que podemos llegar a ser. Pero es una lástima que estas mujeres sean
asesinadas de una manera tan espantosa, pues si bien los datos arrojan un mayor
número de líderes asesinados (hombres), las lideresas también son maltratadas y
aun peor, violadas. Está claro que la falta de humanización de estos asesinos
no tiene límites y se aprovechan de nuestras lideresas de una manera
desastrosa.
Este escrito
busca crear conciencia y sensibilizar al pueblo colombiano, acerca del gran
valor de nuestros defensores. Los líderes y lideresas colombianos merecen ser
escuchados, protegidos y apoyados por todos nosotros. Estos valientes
compatriotas son dignos de todo nuestro respeto y admiración; ya está claro que
el gobierno no quiere poner sus ojos en nuestros líderes, pues si ellos no
actúan, nosotros sí.
No debemos
olvidar a aquellas extraordinarias personas que pierden su vida por defender
nuestros derechos. No debemos dejar morir el legado que han dejado porque cada
una de estas víctimas fue sembrando una semilla en este suelo áspero, por tanto,
es nuestra responsabilidad trabajar por el progreso de esa planta, regarla y
cuidarla para que en algún futuro haya frutos; tal vez no para nosotros o tal
vez perdemos la vida en el intento, pero nuestros descendientes podrán gozar de
esa Colombia en paz con la que todos soñamos.
Conocemos los
riesgos que trae ser un líder o lideresa social. Todos los colombianos somos conscientes
de que, si trabajamos por la comunidad, defendemos lo que nos pertenece y
buscamos un bien terminaremos hechos cenizas. Pero no hay que temer, ya que esto
es lo que pretenden los grupos que asesinan a nuestros líderes. No debemos
dejar que el miedo se apodere de nosotros, pensar diferente, liderar y
encabezar movimientos por un bien no puede ser algo ajeno a nosotros por el
miedo a morir. “un pueblo que no lucha por sus derechos es un pueblo que
renuncia a su libertad” anónimo.
Yo no temo a
morir si muero defendiendo mis principios. ¿Y tú?
Referencias
Anadolu,
A. (7 de febrero de 2019). "El asesinato de líderes sociales no es una
prioridad del gobierno Duque": Amnistía Internacional. Obtenido de El
Espectador:
https://www.elespectador.com/noticias/paz/el-asesinato-de-lideres-sociales-no-es-una-prioridad-del-gobierno-duque-amnistia-internacional-articulo-838440
Bolaños, E.
A. (28 de junio de 2019). La fría posición de la OEA frente al asesinato de
líderes sociales en Colombia. Obtenido de El Espectador:
https://www.elespectador.com/colombia2020/pais/la-fria-posicion-de-la-oea-frente-al-asesinato-de-lideres-sociales-en-colombia-articulo-868319
datasketch.
(s.f.). lideres sociales. Obtenido de datasketch:
http://lideres-sociales.datasketch.co/
El
Espectador. (27 de marzo de 2019). Las violencias contra las lideresas son más
crueles que contra los líderes: Codhes. Obtenido de El Espectador:
https://www.elespectador.com/colombia2020/pais/las-violencias-contra-las-lideresas-son-mas-crueles-que-contra-los-lideres-codhes-articulo-857808
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(25 de enero de 2017). Los 11 líderes sociales asesinados en lo que va del año.
Obtenido de El Tiempo:
https://www.eltiempo.com/justicia/delitos/quienes-son-los-lideres-sociales-asesinados-en-el-2019-312476
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de marzo de 2020). LÍDERES SOCIALES Y DEFENSORES DE DERECHOS HUMANOS ASESINADOS
EN 2020*. Obtenido de Indepaz: http://www.indepaz.org.co/paz-al-liderazgo-social/
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estudios para el desarrollo de la paz. (11 de enero de 2019). lideres sociales
y defensores de derechos humanos asesinados en Colombia. Obtenido de Instituto
de estudios para el desarrollo de la paz: http://www.indepaz.org.co/566-lideres-sociales-y-defensores-de-derechos-humanos-han-sido-asesinados-desde-el-1-de-enero-de-2016-al-10-de-enero-de-2019/
Meza, A. (15
de enero de 2020). ONU advierte las altas cifras de asesinatos a líderes
sociales en Colombia. Obtenido de France 24:
https://www.france24.com/es/20200115-onu-advierte-las-altas-cifras-de-asesinatos-a-l%C3%ADderes-sociales-en-colombia
nacional, r.
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pacifista.
(27 de febrero de 2017). Estos son los 206 líderes sociales asesinados desde el
inicio de la implementación. Obtenido de pacifista:
https://pacifista.tv/notas/lideres-sociales-asesinados-inicio-implementacion/
Redacción
Nacional. (14 de enero de 2020). Colombia fue el país con más asesinatos a
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https://www.elespectador.com/noticias/nacional/colombia-fue-el-pais-con-mas-asesinatos-lideres-sociales-en-2019-ong-irlandesa-articulo-899825
Salazar, S.
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https://colombiacheck.com/investigaciones/explicador-que-es-un-lider-social
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https://www.semana.com/nacion/articulo/asesinato-de-lideres-sociales-uno-por-dia-en-2020/648542
Torres, M.
(20 de marzo de 2019). Colombia ya no esta entre los paises mas felices del
mundo. Obtenido de la FM:
https://www.lafm.com.co/estilo-de-vida/colombia-ya-no-esta-entre-los-paises-mas-felices-del-mundo
[1] Instituto de estudios para el desarrollo y la paz.
[2] Front Line Defenders, es una organización
encargada de proteger a los defensores de derechos humanos en riesgo.
[3] El Ejército de Liberación Nacional, es una organización guerrillera
insurgente de extrema izquierda que opera en Colombia.
[4] El Ejército Popular de Liberación, llamada su disidencia por el
gobierno colombiano como Los Pelusos, es una organización guerrillera
insurgente colombiana de extrema izquierda que forma parte del conflicto armado
interno.
[5] Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, fueron una
organización guerrillera insurgente y terrorista de extrema izquierda.
[6] Junta de Acción Comunal.
[7] lideresa
social que trabajaba por el bien de las personas vulnerables y por las víctimas
del conflicto armado en su municipio el Copey, Cesar. El 3 de julio Tatiana fue
asesinada luego de que saliera de su casa
ubicada en el barrio El Porvenir. La líder iba a subirse a un mototaxi,
cuando un par de hombres que se movilizaban en una motocicleta le dispararon en
dos ocasiones en la cabeza. (pacifista, 2017)
[8] El 7 de enero en Cartagena de Chairá, Caquetá, se registró el
asesinato del líder social Miguel Antonio Gutiérrez, de 40 años, quien era
presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio La Victoria. Según Jaime
Gutiérrez Ospina, asesor de la Confederación Nacional de Acción Comunal,
“varios hombres armados entraron a su lugar de residencia y fue impactado
varias veces a tiros ocasionándole la muerte". (El Tiempo,
2017)
[9] Líder
comunitaria de Cáceres, Antioquia. Fue asesinada a tiros en una cafetería del
municipio el 4 de julio del 2018. (datasketch, s.f.)
[10] La Unidad Nacional de Protección, es una entidad de protección y
escolta adscrita al Ministerio del Interior de Colombia.
[11] Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento.
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