ADOLFITO HITLER SÍ ESTUVO EN TUNJA PERO EL ARTE SE LE OPONE

octubre 30, 2017

Texto escrito por Miyer Pineda

Maestro Neil Avella tras las rejas. Fotografía Miyer Pineda

Obras del Maestro Neil Avella

1. NEIL AVELLA

Esperamos en algunos meses poder culminar un ensayo-crónica sobre la obra del Maestro Neil Avella, quién es hoy por hoy, el artista plástico más importante que ha dado estas tierras, aún a riesgo de que el planteamiento pueda suscitar controversia… Por ahora, desde una perspectiva pedagógica, no podemos dejar de recomendar que visiten su exposición en la sala Rafael Tavera de la Secretaría de Cultura del Departamento, allá en el segundo piso del antiguo ICBA en la hermosa ciudad de Tunja, ciudad en la que por estos días dicen que anduvo don Adolfito Hitler escondiéndose, cosa que no es del todo descabellada sobre todo si se tiene en cuenta la lectura de varios testimonios de la época, incluyendo el libro La Violencia en Colombia de Guzmán, Umaña y Fals Borda, en dónde se señala la presencia de elementos extraños cercanos al falangismo o a los fascismos, en poblaciones del departamento… y quienes desde entonces pusieron a andar la tesis de que en Boyacá se fraguó una suerte de experimento totalitario cuya punta de lanza sería la policía chulavita en anuencia con sectores religiosos y el partido conservador. Tampoco es el único personaje histórico que anduvo por aquí… es posible que el Ché haya pasado por estos lugares en su camino hacia Venezuela, algunos años antes que Adolfito…

Maestro Neil Avella y una de sus obras en la ciudad de Duitama

Obra del Maestro Neil Avella

Pero estas referencias no son un gratuito divertimento porque Adolfo Hitler está en Tunja al lado de algunos de los más ilustres representantes del fanatismo político y religioso de nuestro país… allí, en la exposición del Maestro Neil Avella. Se trata del artista haciéndole una oposición a la estética conservadora que se nutre del odio al otro y que es excluyente a toda costa; se trata del arte como resistencia a ese tumor maligno que ha hecho de Colombia una lechona para devorar mientras los demás han sido adoctrinados para que se maten por las migajas que se caen de sus mesas. El maestro Neil Avella, por un lado, señala el parasitismo de los políticos a lo largo de la historia, y por otro, plantea una reflexión sobre el problema del saber y su relación con la concepción estética que se resiste a hacer parte de los espacios de vigilancia y de control. En su obra la insinuación de que estas prisiones han logrado mutar haciendo del sujeto una parte indispensable de este proceso… por eso su visión sobre la Escuela es tan dura y abismal.

La exposición del Maestro Neil Avella ofrece una mirada que se piensa para pensar el mundo, lo efímero en el cauce que separa los muros, y en ellos lo absoluto: la familia, el trabajo, la historia que nos oprime y el arte que nos salva. Avella concentra su experiencia y la ofrece al mundo para que el visitante que quiera detener el tiempo, la descifre.

El Maestro Neil Avella (Izq) en su taller.

Juan de la Cruz Varela. Obra del Maestro Neil Avella.

2. JUAN CARLOS RONCANCIO

Maestro Juan Carlos Roncancio. Fotografía de Miyer Pineda.

En un auditorio alterno nos encontramos a otro Artista llamado Juan Carlos Roncancio; llama la atención su obra porque se aleja de ese formulismo de lo que hoy por hoy se ha tomado el arte como una peste escudada en ligerezas posmodernas. Roncancio propone un retorno al barro, a la génesis, a la raíz. Así la memoria fluye y la palabra, lo oral, el aire hecho símbolo desde la garganta humana, se convierte en forma que resiste y detiene. En su exposición reconfortó el hecho de que no utilizara conceptos como folklor o arte popular mientras enfatizaba sobre el ancestro que crea con las manos y la palabra. Eso es el artista, o debiera, un ser dialogante con las fuerzas contenidas en el vientre de los elementos. Esperamos que continúe profundizando en ese camino que lo inquieta antes de que explore nuevas formas para dar cuenta con sus inquietudes estéticas...

Exposición del Maestro Juan Carlos Roncancio

Avella se graduó hace varios lustros de la UPTC y Roncancio se encuentra culminando sus estudios en la misma universidad. Qué grato es encontrar buenos artistas de nuestra Alma Mater haciendo obras que piensan algunos de los malestares sociales y culturales que campean en estos tiempos que nos tocó vivir. Visiten las exposiciones y nos cuentan.